Monday, May 24, 2010

OLVIDO

“Una forma de destrucción es el olvido”
Zbynek Baladran
'Socio Function'


En una parte lejana, terrosa, llena de pesado silencio y asfixiante calma hemos dejado guardados, alejados de todo, pequeños pedazos de esperanza mezclados con azúcar y también con hiel.
Hemos olvidado los cantos de una infancia inconclusa.
Hemos dejado hervir hasta morir los paramecios de nuestras fantasías poco maduras.
Dejamos al sol los huesos de masa de pan y tierra para que se consuman con el paso del día.
Concluimos una tarea que nadie nos pidió y a la que condenamos a un gozne.
Acoplamos nuestros cuerpos a pedazos de espacio y juegos de la distancia.
Encerramos sonrisas.
Amortajamos con pretextos quejas y preguntas.
Habitamos la mazmorra de la costumbre.
Creamos armas, perdimos almas.
Comimos la confianza para luego vomitarla.
Soltamos la mano del infante ciego que fuimos para perderlo.
Vendimos lágrimas.
Enmudecimos.
Cortamos las ramas para emprender un vuelo que se pospone todo el tiempo.
Cancelamos. Cercenamos. Cedimos.
Convertimos al hambre en verdugo.
Dimos poco de lo que pensamos para verter en un mar infinito mucho de lo que creímos.
Nos hicimos amantes de la perfidia.
Acomplejamos al futuro con temores de un presente que no suelta su pasado.
Destruimos lo que somos, olvidando lo que fuimos.
El instante preciso.
La gota de sudor que recorre nuestra espalda.
El espasmo de una muerte repentina y la posterior resurrección.
La historia de lo divino.
La frescura de un trago de cielo.
Abrazos tiernos.
Despertares de madrugada.
Besos de luz lunar.
Balbuceos.
Coplas contadas por insectos.
Voces doradas.
El ulular de un bosque habitado por anhelos.
Serpentinas ocurrencias.
Una miríada de millares, de millones de nadas contenidas en gotas de ambrosía animal.
El temblar de una vida.
El grito que no se contiene.
Mirar hacia una ventana.
Aleteos sin sentido.
Carreras contra el aire.
Un quásar.
Respirar.

Destruimos olvidando para seguir adelante, mientras intentamos armar algo que nunca deshicimos, que no pedimos. Destruimos olvidando para no astillar a la razón, para continuar. Destruimos el velo de la bruma incierta con un soplo calculado, para nada más que nada. Para nadie.

Nos destruimos a nosotros mismos intentando olvidarnos.

2 comments:

Dandy Golfo said...

Hay que empaparse en las aguas del recuerdo.
Nunca olvidar.

un abrazo...

Muegano. said...

¡Uyy qué duro! Tanto como certero, nos destruimos para olvidarnos, ¿porque nos dolemos? ¿porque nos avergonzamos? ¿por qué? ;)