Saturday, November 13, 2010

DANZA DE REPTILES Y VACÍOS

Leave me out with the waste
This is not what I do
It's the wrong kind of place

To be thinking of you
It's the wrong time

for somebody new
It's a small crime
And I've got no excuse...

9 Crimes... Damien Rice

Al llegar las cicatrices habían comenzado a hacer acto de aparición. Era su cuerpo un mapa desplegado, lleno de valles morados y ríos de sangre cuajada. Terso hasta el fin, turgentemente mórbido. Un pedazo de plasma que ya no palpita.

Tras las pruebas de rigor sólo queda quitarte las huellas de encima. En vano intentaré que el agua se lleve los restos de la que fue la última de tus noches. Digo en vano porque sé, tras tantos años de dedicarme a esto, que nada logra borrar lo que ya hemos visto. La vida es un quantum traicionero que no te deja dar marcha atrás y te repite todo el tiempo que el sol muere cada día.

Eso morado que comienza a brotar de tu carne muerta es como la última de tus palabras: sólo una imagen, un sonido, sólo un recuerdo. El viaje que comenzaste tiene un fin que nadie, ni siquiera tú conocerás. De tu paseo cárnico, sólo queda un poema que amorata tu cadáver. Se consume poco a poco eso que todos creyeron conocer y sólo acariciaron con la vista.

Lavo tu cuerpo. Al hacerlo, cometo el crimen más grande: intentar borrar el paso del ladrón llamado destino. Ato a ti trozos de tela, juego a envolverte. Veo en tu brazo un tatuaje y al leerlo recuerdo que la vida contesta a la muerte de manera descarada, aunque nunca lo notemos. Río por un momento y sigo acariciando tu frialdad.

Soy el último animal que te tocará y lo hago como si fuera un pequeño dios. Como si fuera posible aniquilar el olor de la brisa o la calidez de un rayo de sol, como queriendo atrapar rayos con las manos o guardar el sonido del océano.

Bajo tu brazo puede leerse "Volvería a hacerlo". Sigo sonriendo mientras recuerdo que para algunos este no es el final.

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Algunos sabemos sin quererlo, otros queremos y aún así, nunca podremos.
Algunos otros podríamos, pero no tenemos la intención.
Se llenan los días de vida entre seres animados... insectos y reptiles...
Nada es vacío... nada...

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3

Monday, November 01, 2010

SALAMANDRA


Guess your dreams always end,
They don't rise up, just descend,
But I don't care anymore,
I've lost the will to want more...


'Insight'... Joy Division

Sigo pensando en tu olor. Sigo creyendo que al despertar, hacías que la recámara (fuese la que fuese) tuviera un halo dulzón, extraño. Pienso en cuánto me gustaba olfatear tus axilas y tu cuello apenas y llegabas, con esa deliciosa mezcla de sudor y tus pocos años. Las sábanas huelen todavía a ti y lamento en momentos así, no haberme quedado con algo que me recuerde que estuviste aquí y que no fue producto de la imaginación.

Fueron pocos los días en que estuviste sólo para mí. Años de espera que se amalgamaron en los cantos de unas cuantas noches, aún así, sigo pensando que al voltear encontraré tu cabello peleando con la luz que entra por la ventana. Sigo escuchando la regadera e imagino de inmediato cómo caen las gotas acariciando tu piel: imagino cómo tirita tras ser besada por el aire. Sentado en esta vieja silla espero a que salgas del cuarto de baño para poder tomarte entre mis brazos, llevarte a la cama y jugar contigo entre las sábanas. Para besarte completa y al hacerlo, besarme también.

Recuerdo que alguna vez me contaste sobre las salamandras y la manera en que éstas pueden regenerar miembros completos de su cuerpo cuando son cercenados. En momentos así me conviene creer que soy como una de ellas. Quiero pensar que tengo del fuego la fuerza y que hago de la vida juego. Quiero pensarte sin recordar que en el fondo deseaba que te arrepintieras y de último momento me pidieras detenerme. Quiero pensar que como reptil, será cuestión de tiempo para adaptarme a este nuevo clima en el que ya no estás, a este lugar del que ya no formas parte, aunque siga sintiendo que estás a mi lado, como un brazo amputado, como una sombra palpitante.

Sé que al cortar tu cuello me deshice del aliento que me daba vida.
Sé que la daga que cortó tu vientre se clavó también en mis entrañas.
Sé que la sangre esparcida fue por los dos vertida.
Sé que hice lo que me pediste.
Sé que al matarte amputé mi corazón.
Me pregunto si algún día, tras dejar de extrañarte, podré sentirlo de nuevo.



Sobre la pared cuelga un cuadro vacío. Te abrí la puerta para que te fueras, justo como siempre quisiste.


Te pienso aún.
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